En La Bombonera, el conjunto Xeneize se quedó con una nueva edición del Superclásico tras vencer a River 1-0 con gol de Darío Benedetto a los 20 minutos del complemento y terminó esta fecha a dos puntos del líder Atlético Tucumán. El Millonario jugó un pálido partido y se alejó de la lucha. Pésimo arbitraje de Darío Herrera, que expulsó a Marcos Rojo y amonestó a 11 jugadores.
Un Superclásico siempre tiene sus condimentos y sus cosas por jugarse. Pero esta vez y con el correr de los minutos, este duelo empezó a ganar mucha más importancia y hasta cierto dramatismo para lo que respecta al futuro de propios y extraños a 9 fechas del final de la Liga Profesional de Fútbol. El triunfo de Argentinos Juniors sobre Central el jueves, el empate de Huracán ante Tigre el viernes, la derrota de Godoy Cruz y el empate de Atlético Tucumán el sábado y la caída en Rosario de Gimnasia ante Newell ‘s este domingo hizo que este sea el Día D para Boca Juniors y River Plate. El ganar o ganar le servía sólo a los dos para meterse definitivamente en la lucha por el título.
El viernes, Hugo Ibarra y Marcelo Gallardo tuvieron sus respectivas conferencias de prensa y más allá de hablar con los medios, no habían dado ningún tipo de detalles con el XI inicial de cada uno. Esconder las cartas cuál partido de truco fue la estrategia de ambos de cara al enfrentamiento madre de nuestro fútbol.
En el conjunto local, Marcos Rojo, en duda para el partido en la semana, era parte del equipo, mientras que Luca Langoni (gran figura en los últimos dos partidos anotando tres goles, dos ante Atlético Tucumán y uno ante Colón) compartía la delantera con Darío Benedetto. En tanto, la visita sorprendió con tres centrales (Paulo Díaz, Emanuel Mamanna y Javier Pinola) y dos laterales (Andrés Herrera y Milton Casco), mientras que Matías Suárez volvía a la titularidad. Además, las dos dudas (en el arco Franco Armani y Pablo Solari en la delantera, ambos con lesiones en la semana) estaban dentro del armado.

En la previa, la igualdad de los dos equipos podría traducirse en el campo. Y claramente fue así, con Boca tratando de manejar la pelota y River esperando agazapado de contra, pero también se vieron las escasas ideas de ambos. El equipo de Gallardo generó la única ocasión de peligro: tras un córner de Quintero, Mamanna anticipó a los centrales de cabeza y Agustín Rossi la sacó en la línea con una gran salvada. Después de allí, fue poco y nada. Boca quiso aprovechar la rapidez de Juan Ramírez y del juvenil Langoni, pero solo quedó en intentos y faltas de entendimiento. Lo mismo pasó con River, tratando de aprovechar algún escape de Solari o de Juan Fernando Quintero, pero a Matías Suárez se lo notó muy desconectado en la resolución. Mismo caso con la dupla en el mediocampo Enzo Pérez- Nicolás de La Cruz, que perdió en varias ocasiones con Alan Varela y Gulllermo Fernández. Los dos trataron de generar intenciones, pero buscaron bloquearse mutuamente y el empate parcial fue lo que se acercó a la realidad.
El Muñeco movió piezas ante la poca fineza en ataque. Adentro Ezequiel Barco, Miguel Borja y Rodrigo Aliendro y afuera Quintero, Solari y Andrés Herrera para poner un 4-3-1-2. Paulo Díaz pasaba de central a Lateral derecho, mientras que el ex Independiente pasó a ser enganche y el colombiano junto a Suárez eran las referencias de área. Mientras tanto, el encuentro iba tomando cierta ebullición y las rispideces estaban a la orden del día.
Boca intentó tomar cierto protagonismo en el complemento y fue en una ráfaga de dos minutos que pudo destrabar el juego. Primero, tras un centro de Frank Fabra, una carambola de Ramírez hizo trabajar a Armani y mandó la pelota al córner, Tras el lanzamiento desde la esquina, Darío Benedetto ganó por arriba y con un frentazo puso el 1-0 para el Xeneize. Con estas jugadas en continuado, los de Ibarra se ponían en ventaja.

Si ya el partido se estaba tornando polémico con una paupérrima actuación de Darío Herrera ante su permisividad y la facilidad de sacar tarjetas amarillas (11 en total: 6 por el lado de Boca, 5 por River), quedó como una de las imágenes del duelo como se retiró de la cancha Aliendro. El ex jugador de Colón se fue ensangrentado en sus fosas nasales, mareado y con un ojo dañado producto de un choque con Alan Varela. En su lugar, entró Agustín Palavecino. Según las primeras informaciones, el volante que fue una de las joyas del pasado mercado de pases sufrió una fractura con hundimiento de su maxilar derecho. Desde aquí, se pide por su pronta recuperación.
Aprovechando su ventaja, Boca se rearmó en defensa. Carlos Zambrano entró por Payero, mientras que Cristian Medina entró por Juan Ramírez. Esa línea de cinco en el fondo (Advíncula- Figal- Rojo- Zambrano-Fabra) hizo que el local achique los espacios e hizo que River pierda sus chances de ser más profundo y buscar a Lucas Beltrán (que entró por Suárez), haciéndolo probar en varias oportunidades de media distancia, ambas por intermedio de Palavecino. También hizo recambios de tres cuartos hacia adelante, con Norberto Briasco y Luis Vázquez entrando por Langoni y el goleador Benedetto. Boca también tuvo una gran posibilidad para aumentar, con el remate de Medina que Armani contuvo en dos tiempos.
Para el cierre, sólo quedó para resaltar la expulsión de Marcos Rojo por una durísima plancha sobre Nicolás de la Cruz. El ex defensor de Estudiantes y de la Selección Nacional sufrió su segunda tarjeta roja en un Superclásico, ya que hace un año atrás en el Monumental también se marchó a las duchas antes de tiempo.

Boca se quedó con un triunfo que lo pone en carrera para lo que queda del torneo, dejándolo a dos puntos de Atlético Tucumán. Tras un juego trabado y disputadísimo, los detalles fueron los que le dieron estos tres puntos de manera trabajada y sin sobrarle nada. Fue astuto en los momentos que aprovechó y después hizo gala de sus fortalezas defensivas, algo que padeció durante ciertos tramos del campeonato. Además, esta tarde- noche en La Bombonera queda como la de la redención de Darío Benedetto, un goleador criticado que quedó en el centro de la escena ante varias cuestiones futbolísticas y que fue el encargado de quebrar el cero que lo deja en la pelea por la corona.
En tanto, River dejó una imagen bastante pálida, retrocedió varios pasos con respecto a algunas actuaciones previas a este encuentro y dejó cierta preocupación a nivel colectivo. Un golpe anímico bastante fuerte cerca del final que lo empieza a despedir de las chances del bicampeonato.
EL BOLETÍN DEL PARTIDO
Boca Juniors (1) : Agustín Rossi; Luis Advíncula, Nicolás Figal, Marcos Rojo, Frank Fabra; Martín Payero, Guillermo Fernández, Alan Varela, Juan Ramírez; Luca Langoni y DARÍO BENEDETTO. DT: Hugo Ibarra.
River Plate (0) : Franco Armani; Marcelo Herrera, Emanuel Mammana, Paulo Díaz, Javier Pinola y Milton Casco; Enzo Pérez, Nicolás De La Cruz, Juan Fernando Quintero; Pablo Solari y Matías Suárez. DT: Marcelo Gallardo.
Gol: 65’ Darío Benedetto (BOC).
Cambios: 45’ Ezequiel Barco X Juan Fernando Quintero, Miguel Borja X Pablo Solari y Rodrigo Aliendro X Andrés Herrera (RIV), 64’ Norberto Briasco X Luca Langoni (BOC), 69’ Agustín Palavecino por Rodrigo Aliendro (RIV), 70’ Lucas Beltrán X Matías Suárez (RIV), 73’ Cristian Medina por Juan Ramírez (BOC), 74’ Carlos Zambrano por Martín Payero (BOC), 80’ Aaron Molinas por Guillermo Fernández y Luis Vázquez por Darío Benedetto (BOC).
Amonestados: Frank Fabra, Marcos Rojo, Luis Advíncula, Guillermo Fernández, Juan Ramírez y Luis Vázquez (BOC); Nicolás de la Cruz, Paulo Díaz, Milton Casco, Miguel Borja y Javier Pinola (RIV).
Expulsado: 96’ Marcos Rojo (BOC).
Árbitro: Darío Herrera (MAL). LA FIGURA: DARÍO BENEDETTO (BOCA)